La Plaza Mayor es un conjunto arquitectónico excepcional que refleja la arquitectura rural de la baja Edad Media. Construida entre los siglos XV y XVI, tiene una planta irregular y abarca más de 4.000 metros cuadrados. Se destaca por sus casas porticadas con soportales de columnas de granito y arquerías de ladrillos. Algunas de estas edificaciones presentan galerías de ventanales con columnas delgadas y arcos de medio punto. Muchas de las fachadas de los edificios están revestidas con cal blanca para su protección. Esta plaza medieval es considerada uno de los conjuntos arquitectónicos más valiosos de la Península y ha sido declarada Monumento Histórico-Artístico de Interés Nacional.

La Plaza Mayor se configuró como un espacio de mercado y ocio entre las parroquias de San Pedro (siglo XV) y Santa María de la Consolación (siglos XV-XVI). En la actualidad, sigue siendo utilizado como lugar para mercados y diversos eventos festivos. En esta plaza se encuentran varios edificios representativos de la localidad, como el Corral de Comedias, el Ayuntamiento y el Palacio de los Condes de Alba de Aliste, que ahora funciona como la Hospedería Puente de Alconétar.

La calle Mendos es una de las vías de acceso a la Plaza Mayor y es característica del barrio de la Judería. En esta esquina se encuentra conservado el arco de entrada a la plaza. En su origen, había arcos similares en las cinco entradas a la plaza, pero actualmente solo se conservan dos. Las construcciones cercanas al arco de Mendos son de las más antiguas de la plaza, datando del siglo XV. La calle Mendos es peatonal y no presenta desniveles, excepto en su último tramo al llegar a la Calle Angosta, donde hay cierta pendiente.

Plaza del barrio de la Judería, rodeada de casas bajas de dos alturas. Tiene acceso a la calle principal de la Judería, la calle Angosta. Tiene forma irregular trapezoidal en planta y no cuenta con desnivel. Es exclusivamente peatonal y, debido a su orientación, ofrece sombra durante parte del día.

Se trata de un patio típico de las casas de la Judería que solían contar con un patio delantero. Este patio en particular se ha abierto y se encuentra en la Calle Angosta, que es la vía de acceso al mismo. Cuenta con una reja como cerramiento, pero su acceso es público. El barrio de la Judería conserva su estructura urbana original, con calles estrechas e irregulares. En muchos casos, las casas aún mantienen su estructura original.

Se trata de un ejemplo de arquitectura popular construida entre los siglos XVII y XVIII. Este conjunto arquitectónico se encuentra en las afueras del pueblo, en una plaza que cuenta con vegetación y muros de piedra en parte de su perímetro. En uno de estos muros se ubica la salida de un arroyo, mientras que también se encuentran una serie de caños utilizados para abastecer de agua a los animales y para riego.

El Convento de San Antonio de Padua es un convento construido en el siglo XV, considerado uno de los centros religiosos más destacados de la época. Su estilo arquitectónico es renacentista y está construido en sillería granítica. Actualmente, se encuentra en estado de ruina y en desuso desde el año 1835, tras la Desamortización de Mendizábal.

El convento está ubicado en las afueras de la localidad y se accede a través de un camino de tierra con cierto desnivel. Dado su estado de ruina, no es posible ingresar al interior del edificio. El área propuesta para una posible intervención corresponde al espacio exterior que limita con la fachada norte y oeste de la nave.

El Convento de San Antonio de Padua destaca por sus grandes dimensiones monumentales y su valor artístico. Es visible desde varios puntos de la localidad y ha sido declarado Bien de Interés Cultural, además de estar inscrito en la Lista Roja de Hispania Nostra.

Paraje natural ubicado en las afueras de la localidad con acceso a través de un camino de tierra desde el casco urbano. Se encuentra en una posición elevada, lo que permite disfrutar de vistas panorámicas excepcionales del Convento de San Antonio de Padua y una parte del pueblo. En su perímetro, se encuentran muros de piedra que son característicos de las propiedades en la zona. El paraje cuenta con árboles dispersos, algunos de ellos, olivos. Además, cuenta con una explanada con suelo de tierra. Debido a su lejanía del pueblo, es un lugar especialmente favorable para la observación del cielo nocturno.

La ermita, construida entre los siglos XVII y XVIII, tiene una notable importancia histórica y religiosa en la localidad. Cada enero, se celebra la festividad de San Antón con diversos eventos y actividades. Cuenta con una explanada en uno de sus laterales con áreas de juegos para niños.

Situado en las afueras de la localidad, cerca del Instituto de educación secundaria. Se encuentra en un alto con muy buenas vistas al Paraje de las Albuferas y sus lagunas. Es un área por el que los habitantes de la localidad pasean a diario. Su acceso se realiza a través de un camino de tierra.